Disminuir los niveles de emisiones de “super” gases de efecto invernadero

Desde la década de 1970, NRDC ha estado a la vanguardia de la lucha para eliminar las sustancias intensivas en contaminación que agotan la capa de ozono (a menudo se encuentran en refrigeradores y aires acondicionados) y reemplazarlas con alternativas amigables con el medio ambiente. En la década de 1970, lideramos los esfuerzos para prohibir los clorofluorocarbonos nocivos (CFC). En la siguiente década, lideramos la defensa del Protocolo de Montreal sobre sustancias que agotan la capa de ozono. En 1986, hicimos la primera propuesta para una eliminación global de CFC,  que condujo a uno de los mayores logros ambientales del mundo.

Cuando se eliminaron los CFC, los hidrofluorocarbonos (HFC) los reemplazaron. Si bien los HFC no destruyen la capa de ozono, estos super contaminantes aún tienen cientos o miles de veces el poder de captura de calor del dióxido de carbono. También son los contaminantes climáticos de más rápido crecimiento y su crecimiento sin control podría agregar hasta 0.5 grados Celsius a las temperaturas globales para fines de siglo.

Hace ocho años, propusimos usar el Protocolo de Montreal nuevamente para reducir los niveles de HFCs y crear apoyo en países clave, especialmente Estados Unidos, India y China. El 15 de octubre de 2016, ese trabajo valió la pena cuando más de 150 países firmaron la histórica Enmienda de Kigali (llamada así por la capital de Ruanda donde fue adoptada). Este acuerdo cortará el crecimiento desenfrenado de los HFC y los reemplazará con una nueva generación de productos químicos y productos alternativos que usan menos energía y producen menos contaminación.

Estimamos que el uso de HFC evitado a través de la Enmienda de Kigali será igual a más de 70 mil millones de toneladas de dióxido de carbono en los próximos 35 años. Eso equivale a eliminar las emisiones de carbono de todo el planeta durante más de dos años.

Pero aún no hemos terminado. Debemos asegurarnos de que la Enmienda de Kigali se cumpla y aplique en Estados Unidos, China e India, así como en países clave de América Latina. Estamos colaborando con socios de la industria para crear aires acondicionados y refrigeradores más eficientes que dependan menos de productos químicos nocivos y satisfagan una necesidad muy importante. Estamos trabajando para reducir la necesidad de aire acondicionado expandiendo el uso de aires acondicionados más eficientes y techos fríos, y abogando por mejores estándares de eficiencia energética. También utilizaremos nuestra incomparable experiencia técnica, legal y de políticas para garantizar que el Protocolo de Montreal esté adecuadamente financiado y que todos los signatarios hagan su parte.

Nuestras cuatro décadas de experiencia han agudizado nuestra incomparable experiencia legal, técnica y política sobre cómo limitar eficazmente estos peligrosos productos químicos. Como siempre, seguimos enfocados en el próximo horizonte y en cómo podemos hacerlo más seguro y más verde.